Es la crónica de Abby, una adorable niña de 4 años que sufre cáncer infantil, tiene leucemia, una patología que por lo general la sufren los jóvenes.
Ella está internada en el Hospital Infantil de Nueva York, una de las superiores clínicas para tratar el cáncer en el planeta. Lamentablemente, más allá de que se hicieron varios esfuerzos, Abby está perdiendo la guerra contra esa horrible patología. Todos los días que sucede se debilita más su cuerpo, pero no decae su espíritu de pelea.
Nada le quita la alegría y la promesa, debido a que aunque es muy chiquita, un hombre llegó a su historia. Hablamos de su enfermero preferido, Matt Hickling, quien está a cargo de sus cuidados y su supervisión del todo el tiempo. Después de un tiempo de conocerlo, Abby le mostró a su madre que se había enamorado de su enfermero y que deseaba casarse con él.
Su madre, asombrada terminó conmovida con la alegría de su hija, por lo cual habló con todo el conjunto del hospital, introduciendo el futuro novio y en menos de 24 horas, habían listo una boda sorpresa para la hermosa Abby.
Cuando entró a la cuarto, Abby notó que volaban pétalos y sonaba la música clásico para el matrimonio. Fue en ese exacto momento que Matt pregunta “Abby ¿Quieres casarte conmigo?” y la chiquita grita de emoción ¡Acepto!.
Después, su propio doctor con ropa de sacerdote, les otorga la bendición y los esposos intercambian unos lindos anillos con un enorme diamante de caramelo. Consumieron, rieron y celebraron. Los recién en matrimonio relucían de alegría. Había un aire de promesa y amor en esa cuarto de hospital. Entonces llegó el obsequio de Matt para su novedosa mujer, un hermoso coche último modelo con un letrero en la parte de atrás que decía “Recién en matrimonio”.
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Esta es la niña. >
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Padre e Hija.
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Padre e Hija.Matt admitió que siempre recordará ese instante, ya que no hay nada de mayor impacto para un enfermero que llevar algo de felicidad y luz a sus pacientes. Confiamos en que Abby tampoco lo va a olvidar.
Después de unos pocos meses, Abby murió como és como se había previsto; sin embargo, ese hospital jamás va a olvidar esa hermosa boda que llenó de alegría el corazón de una niña tan linda y particular.
Solo nos queda decir que para nosotros en Bundopo.com, estas son las pequeñas cosas que hacen vivir feliz.
Confiamos en que los padres de Abby hayan encontrado consuelo a su mal.
No nos queda duda de que en el medio de varios, introduciendo el nuestro, vivirá la sonrisa de esa niña, la novia más hermosa que nunca se vió en Nueva York.