Es increíble la manera en que la maternidad le hace a tu intuición. De alguna forma la manera en que eres consciente de otro ser humano y la conexión que se crea entre ambos se incremente, es algo que parece no poder explicarse; y sobre todo, te conviertes en alguien capaz de darlo todo por esa personita.
Imposible que fuera más cierto como para Shelby Ann Carter, de Illinois lo fue. Su rápida reacción y amor terminó salvando a su pequeña de tan sólo 12 días de nacida.
El 30 de enero los bomberos acudieron a una llamada de emergencia, se trataba del incendio en la casa que Shelby compartía con su madre y su hija. La joven fue hallada muerta en una habitación del segundo piso intoxicada por el dióxido de carbono producto del incendio.
Sorpresivamente Keana Davis, la pequeña hija de Shelby, no se encontraba en la habitación. Los bomberos la encontraron sobre una pila de escombros acomodada y atada perfectamente en su silla para autos (porta bebé), había sido lanzada por la ventana por su madre para salvarle la vida.
Incluso en las circunstancias más peligrosas, y con un tiempo extremadamente limitado, Shelby pudo pensar rápidamente y atar a su hija en la silla. Más allá de quemaduras menores, la infante se encontraba totalmente sana, fue llevada al hospital en buenas condiciones y salió solo algunas horas después.
El jefe del departamento de bomberos dijo:
“Es increíble que ella haya sido capaz de pensar de esa manera y salvar a su bebé. Diría que es poco menos que un milagro como todo sucedió”.
Amigos y familia de la joven mamá lloran aún la pérdida de Shelby, para quien la maternidad era su mayor alegría.
“Shelby estaba muy orgullosa de su hermosa bebé”, dijo su tía Kathy Carter.
Una verdadera heroína que perdió la vida por salvar la de su hija, siempre será su ángel guardián. Está mamá es el claro ejemplo que el amor puede hacer milagros, ella se merece todos los me gusta del mundo.
¿Qué opinas de su forma de actuar? Fuente: CNN